El tema de mi tesis de maestría tiene que ver con los procesos de racialización que intervienen en la organización del deseo de hombres gais (en Tijuana). A pesar de que ya antes había leído a Néstor Perlongher, cuando decidí trabajar sobre deseo me lo tomé más en serio y decidí leer El negocio del deseo[*]. En este trabajo antropológico, Perlongher habla apenas en pocos apartados sobre la “raza”, aunque admite su presencia como uno de los “tensores –de atribución de valor y de distribución en el código categorial” que involucra el deseo homoerótico entre michês (prostitutos “machos”) y clientes, en el “gueto paulista” de mediados de la década de 1980. Sin embargo, éste no dejaba de ser, para Perlongher, un tensor secundario, “más ‘oculto’” que, y aparentemente subordinado al, género, la clase y la edad (p.222). Sigue leyendo